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Paz, tranquilidad y relax, esas son las sensaciones que transmite un paseo en globo aerostático. Conforme subes a la cesta te olvidas del madrugón, del posible miedo o vértigo, sólo te dedicas a contemplar el mundo desde cientos de metros de altura. Si además la ciudad elegida es Segovia y el viento te lleva a recorrerla entera, la experiencia es fantástica.

Olvidad el vértigo, al no tener punto de referencia, no se tiene.

Tras unos minutos de preparación, llenando el globo de aire con la ayuda de unos ventiladores, nos subimos al globo y comenzamos el despegue, el cual se realiza sigilosamente, elevándose lentamente la cesta del suelo y cogiendo altura conforme llegamos a las capas de aire caliente.

Fase de calentamiento

Fase de calentamiento

En ese momento, coordinando los movimientos con los otros globos en ruta, el piloto deja que el viento decida. Tenemos la suerte de ir hacia el centro de la ciudad, barriendo de izquierda a derecha todo el casco antiguo.

Panorámica de los globos y Segovia

Panorámica de los globos y Segovia

La cesta del globo se compone de 5 compartimentos: 4 con capacidad de 4 personas para los pasajeros y uno central para el piloto y las bombonas de gas.

Segovia es una ciudad ordenada y desde las alturas se observa a la perfección, con sus numerosos parques como refugio. Su casco antiguo se compone de numerosos edificios civiles y religiosos, pero no sólo católicos, la judería sigue siendo importante en la ciudad, teniendo las murallas como el nexo de unión entre lo antiguo y lo moderno.

El Alcázar, la catedral de Santa María, sus iglesias, el acueducto, nada escapa a nuestro paseo. Observarlo con calma desde las alturas te hace encontrar nuevos detalles y contemplar lo magníficas que son esas construcciones, sobre todo el Acueducto que data del siglo II dC.

El paseo en globo es de aproximadamente 1 hora, pero dependerá de las condiciones y la zona de aterrizaje.

Seguimos subiendo y llegamos a una capa de aire estable que nos permite sobrevolar varios minutos sin apenas movimiento. Es una delicia contemplar el mundo desde las alturas sin ruidos. Al tener un día tan despejado, podemos observar toda la sierra de Segovia y Madrid, incluso se ve el palacio de la Granja.

Ahora sólo queda disfrutar de un paseo por las nubes:

Y seguimos volando por más de 1 hora porque no encontrábamos un lugar adecuado para aterrizar, pero al final la destreza de nuestro piloto lo consiguió un terreno en el este de la ciudad.

En mi primer paseo en globo, las corrientes de aire nos mandaron hacia el lado opuesto, disfrutando de un paseo por los campos de cereales, aterrizando cerca de la penitenciaría.

El aterrizaje fue tan perfecto que incluso aparcó la cesta en el remolque del coche que nos devolvería al punto de despegue. Ahora sólo quedaba recoger el globo y disfrutar de un sabroso desayuno con una copa de cava para brindar por la experiencia.

Datos de interés.

  • El viaje lo hicimos con Aerotours, pero son muchas las empresas que ofrecen servicios parecidos.
  • Todo el personal, destacando sobre todo los pilotos, son excelentes profesionales y comunicadores, siendo parte clave de la experiencia.
  • El día de vuelo se debe estar sobre las 7:00 en el punto de despegue: Aranjuez, Toledo, Segovia, etc. Depende de cada persona elegir el destino que más se adapte.
  • Se incluye un desayuno/almuerzo tras el vuelo.
  • Te proporcionan un diploma del vuelo y graban un vídeo recordatorio de la experiencia.
  • Precio: 150€/persona aprox.
Los globos preparados para despegar

Los globos preparados para despegar